Según un informe reciente de la Organización Mundial de la Salud, el ahogamiento causa la muerte de 372 millones de personas en todo el mundo cada año. Si bien la mayoría de las víctimas son niños pequeños, el ahogamiento también afecta a los adultos.
El ahogamiento a menudo ocurre debido a que las personas sobrestiman su capacidad para nadar. Sin embargo, todos los nadadores encontrarán dificultades relacionadas con el agua de vez en cuando. Para reducir su riesgo, nade con otra persona o use un dispositivo de asistencia para evitar ahogarse.
El ahogamiento es un proceso silencioso que ocurre en minutos. Puede causar dificultad respiratoria, que es un signo de ahogamiento grave. Es esencial mantener la calma y mantener a los niños supervisados de manera segura mientras están en el agua. Los ahogamientos pueden poner en peligro la vida, por lo que es fundamental evitar que se dañen a sí mismos.
Los ahogamientos son comunes en ambientes acuáticos. Incluso una pequeña cantidad de agua puede provocar ahogamiento. Asimismo, dar vueltas en aguas poco profundas puede provocar daños cerebrales y traumatismos craneales, lo que aumenta el riesgo de ahogar. Los ejercicios de hipoxico mejoran tu capacidad para nadar largas distancias, lo que puede ayudar a reducir el riesgo de ahogar.
Las tasas de mortalidad más altas se registran entre los niños de uno a cuatro años. La forma más eficaz de prevenir el ahogamiento en los niños es vigilarlos de cerca. Incluso si su hijo sabe nadar, es aconsejable supervisarlo y buscar atención médica si muestra signos de ahogamiento.